martes, 16 de mayo de 2023

Maquina vacia

 

La maquina haciendo de las suyas,

Siendo fría y calculadora,

No puede lo que el ser humano,

Que es dar emoción y amor,

A cada texto, a cada canción,

A cada cuento y cada instrucción.

Veo ciertos anonadados con el avance tecnológico

Como si de ello dependiera la vida,

Como si realmente necesitaramos entender,

Mas allá de lo que nuestro cerebro puede procesar…

Sin ver que para sanar,

Con la vida que llevamos dentro debemos conectar…

Y el wifi mas importante no es el electromagnético artificial,

Sino el del corazón cuando se abre al amor.

Precolonos

 

Antes de la colonización,

Antes de la ruptura con la naturaleza,

Nosotros éramos pachamameros,

Latinos y nativos,

Conectados con el fruto como alimento.

No teníamos a Hipócrates,

Teníamos la intuición del corazón,

No necesitábamos libros,

Pues todo lo veíamos sin razón,

No hacían falta tanta palabra,

Un ritual de la tribu danzando al fuego,

Cantando sin pensar,

Era mucho mas atractivos,

Que ante una cena el televisor mirar.

Y así momento a momento,

El humano se fue perdiendo,

De si mismo por supuesto,

Persiguiendo el vil oro y nada mas,

A costa de la destrucción de la humanidad,

Como concepto de integración con la Verdad,

Que es que solo somos un pasar efimero,

En eones de tiempo de la Tierra y el Sol,

Que sin ellos no existiríamos,

Y mas que un Dios Lejano al cual rendir pleitesía y ruego,

Tenemos a la Tierra llorando por no agradecerle,

Su sostén y alimento.

Mi genoma

 

 Soy humana, soy carne y soy huesos,

Soy músculos, soy sangre que late,

Soy aire y viento que dan energía a mi cuerpo,

Soy tejido, soy célula, soy mis genes,

Por ende también soy mi pasado,

Soy mis antecesores,

Soy mi historia no solo en vivencia,

Sino en mi genoma…

Soy mujer que siente la creación,

Que siente el vacio de la menstruación,

La perdida de la vida, el vacio del ser,

Que para no morir y perderme,

Creo el arte para sostenerme. 

Accion a la Tierra

 

No darme a cuenta a veces ni de quien estoy siendo,

Porque el impulso juega,

Porque la reacción es mas fuerte que la respuesta,

No poder responder hábilmente ante el caos,

No poder accionar ante la realidad abrumante,

Esa de las dificultades terrenales cotidianas,

Del día a día, humano, y no celestial,

Llevar el cielo a la tierra es integrar,

No es solo razonar o idealizar,

Es accionar y concretar.

Torbellino

 

Torbellino de emociones que suben y bajan,

Que ciclan, que generan enojo, que generan dolor,

Que generan tristeza, que remueven todo el pasado,

Que buscan avivar la vida desde esas cenizas,

De haber estar sumisos y congelados,

De no poder poner voz al amor del corazón,

De callar por miedo a ser,

De callar por miedo a quedar mal,

De callar y convertirnos en adictos,

Sin decir lo trascendente e importante,

Que no esta en los libros…

Que esta en la conexión con la vida nuestra

La que nos late en cada vena y arteria del cuerpo,

En cada inhalación y exhalación,

En cada alimento que ingerimos,

En la tierra que tocamos y en el sol que tomamos.

Inflexible

 La inflexibilidad del ser…

Cuando se arma el muro entre vos y yo…

Cuando es difícil conectar de corazón a corazón…

Cuando la necesidad de sobrevivir es mas fuerte que nosotros dos…

Cuando nos defendemos de no seguir doliendo el dolor…

Cuando nos distanciamos del sentir del otro para no padecer…

Cuando el enojo y la imposición se encarnizan para defender…

Lo indefendible…

Lo que no tiene defensa…

Porque no la hay…porque no es necesario…

Porque acorazarnos nos aleja y nos enajena…

Si, poner una barrera…si, poner limites…mas no blindarnos

Saber cuando permeabilizar, cuando dejar entrar, cuando no.

Cuidar tiempo, energía y vida. 


lunes, 14 de noviembre de 2022

Purgatorio

 Me acuerdo la conexión con el abuelo Emilio. Me acuerdo de su alegría y su amor hacia mi. Me acuerdo que al vino tinto la gustaba beber. Me acuerdo de la conexión que teníamos pues fue más que un abuelo, fue mi verdadero papá. Me acuerdo de cuando íbamos a plaza Irlanda a pasear. Me acuerdo aquel día que la calesita de la plaza, cierta gente mala la fue a incendiar. Me acuerdo que mi abuelo tenía miedo de decirlo. Me acuerdo que me quería cuidar de que no me ponga mal. Me acuerdo que el sabía que las injusticias a mí me dolería. Me acuerdo que el entendía de mi sensibilidad.



Me acuerdo entonces que me lo contó y me puse a llorar. Me acuerdo que fue la primera vez que no comprendo la maldad. Me acuerdo que me dolió pensar que hubiera gente que quiera a los niños dañar.

Me acuerdo que mi abuelo me vino a consolar.



Me acuerdo que ese fue el comienzo del final. Me acuerdo que el ya se empezó a cansar. Me acuerdo que se dió cuenta quien era yo. Me acuerdo que allí se empezó a soltar para partir. Me acuerdo que tenía 91 años y yo intuía su partir. Me acuerdo que para mí todo parecía eterno, no creía que hubiera fin tampoco en lo que es tan bello. Me acuerdo de mi abuelo como cada día y una lágrima recorre mis mejillas porque fue injusto que a él se lo llevarán en vez de tanta gente mala. 



Me acuerdo que el me abrazaba fuerte porque yo vibraba diferente. Me acuerdo que me llevaba a una heladería a probar helado de limón. Me acuerdo que si circulación sanguínea empezó a flaquear y entonces lo tuvieron que internar.


Me acuerdo que mi papá a duras penas me podía cuidar. Me acuerdo que el miedo me empezó a infundar. Me acuerdo que pensaba que no solo perdía a mi abuelo sino también a mi mamá y nadie me vendría a consolar. Me acuerdo que mentiras empecé a contar para conservar más tiempo con mi mamá siendo egoísta de su tiempo pero...carajo! Es que la necesitaba. Me acuerdo que tampoco quería perder a mi abuelo....yo palpitaba su enfermedad.


Me acuerdo que volvió después de esa primera internación y postrado mi abuelo ya quedó. Me acuerdo que le decía a mi abuelo que se levanté y camine pero el ya no lo eligio a pesar que podía usar andador.


Me acuerdo que nos acostabamos en la cama y el a mí me respetaba. Me acuerdo que el era un hombre honesto y de palabra, lleno de amor por la vida conectado con la ley divina. Me acuerdo del juego que me hacía y me resultaba tierno y divertido, ese que me robaba la nariz y se la trataba y me quedaba sin nariz...solo nosotros nos entendíamos. Me acuerdo tanto de esos momentos de Emilio que yo quería saber más quién era el porque en ese momento mi evolución no me permitía del todo entender su misión.


Me acuerdo que fui entendiendo su misión cuando le tocó partir en el año 1999. Me acuerdo que fue un año crucial, empezó mi primera somatizacion. Me acuerdo que la garganta se me hincho y no podia hablar y contar lo que percibia pues nadie me entendería. Me acuerdo que cuando el falleció yo me enferme y no podía hablar, la fiebre empezaba a volar y junto con mi enfermedad, a mi abuelo le tocó viajar hacia el plano astral.

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