¿Qué es el tantra?
El tantra es muy conocido globalmente por la retención eyaculatoria
en el hombre y por la práctica sexual con suavidad, lentitud y romance; sin
embargo, es un camino espiritual, una filosofía de vida que se refleja, luego, en
la vida terrenal.
Esta filosofía de vida nos propone reconectarnos con nuestro
ser esencial, nuestra conciencia, nuestro espíritu y nos invita a unir el amor
con lo sexual, que en nuestra sociedad contemporánea se ha separado por el sexo
pornográfico.
¿Qué es el sexo
pornográfico y en qué se diferencia del Tantra?
Hoy día la búsqueda sexual está marcada por el sexo industrializado,
el sexo mecánico, el buscar el orgasmo como meta final sin conectar con lo
sensible ni con el afecto, a estar con personas de manera promiscua sin
profundizar en el lazo, el sobrevalorar nuestra envoltura física por sobre
todos los demás aspectos que nos constituyen.
Se busca satisfacer nuestros deseos mas primarios, nuestros
sentidos físicos sin tener en cuenta todos los planos que nos constituyen y no
necesariamente hablando del espíritu, sino del emocional y el mental.
El tantra como contrapartida nos invita a conectar con el
momento presente, nos abre el corazón, nos invita a amar a la persona que
tenemos frente a nosotros. Empezamos a
conectar con el otro tal como es sin proyecciones futuras o pasadas. No vemos en el otro lo que nos gustaría que
fuese ni lo que imaginamos que podría suceder, solo nos conectamos con lo que
es, por supuesto, con aceptación y mucho amor.
¿Es necesario formar
una pareja o estar en pareja para la práctica del tantra?
Mi respuesta es que no porque es un camino muy personal de
uno, si ese camino que decidís practicar en vos mismo y te animas a quebrar con
las estructuras socioculturales recibidas, eventualmente vas a estar abierto a
que fluya esa energía con un igual.
El tantra se puede practicar con absolutamente todas las
personas que nos relacionamos porque empezamos a verlas desde el corazón y no
como un objeto de deseo. Vemos su ser, nos vemos reflejados en el otro y lo
amamos. Transmitimos ese amor en un abrazo, en una caricia, una mirada, un beso
sin necesidad de que se llegue a algo más.
¿Cómo se practica el
Tantra? ¿Cómo se aprende a ser tántrico?
Al ser una enseñanza esotérica, suele transferirse de
maestro a iniciado.
Hay maestros tantricos que elaboran reuniones y grupos donde
se enseñan y transmiten dinámicas tantricas para poder empezar a transformar
nuestra visión amorosa y sexual de la vida desde el interior de uno.
Entre las dinámicas que se realizan se encuentran las
siguientes:
·
Acostarse en el suelo, conectar con el cuerpo,
con la gravedad, con el tacto. Luego empezar a moverse lentamente manteniendo
los ojos cerrados y sintiendo el calor y tacto de otros cuerpos. Es dejarse llevar por ese tacto, sintiéndose sin
saber racionalmente con quien nos estamos “refregando”
·
Caminar por el espacio y detenerse, cuando el o
la guía del taller lo digan, frente a una persona y mirarla a los ojos.
Posicionar una mano en el corazón de la otra persona y sentir sus latidos, su respiración
mientras conectamos con las miradas. En este ejercicio de miradas también, la guía,
puede proponer ver reflejado a nuestra madre, a nuestro padre e identificar y
expresar nuestros agradecimientos o miedos respecto a ellos, también respecto a
nosotros. ¿Podemos sincerarnos con el otro y con nosotros mismos? ¿Podemos
entregarnos y confiar en el otro o tenemos prejuicios aun que nos impiden?
·
Siguiendo con la caminata, nuevamente nos
encontramos con otro par y la guía nos invita a abrazar al otro, contenerlo y
luego viceversa, ser contenidos. ¿Nos dejamos contener? ¿Podemos contener a
otra persona? ¿Cómo nos sentimos en el abrazo del otro y abrazándolo?
·
Y más caminata, nuevamente con otro par, uno le
venda los ojos al otro y lo va guiando por el salón. ¿Podemos confiar hacia
donde nos lleva la otra persona o sentimos que no podemos fluir? ¿Cómo nos
sentimos mas cómodos: siendo guiados o siendo guías?
En estas dinámicas descubrimos nuestras estructuras mentales
y por tanto que nos impide fluir en el amor con el otro. ¿Podemos amar al otro
sin importar su apariencia? ¿Nos dejamos amar a pesar de nuestras culpas o
inseguridades?
¿Y cómo se aplica
esto en el sexualidad tantrica con una pareja?
Al conocernos más a
nosotros mismos y aceptándonos, liberándonos de estructuras preconcebidas
podemos llevar ese vinculo con nosotros mismos al otro.
Ya no es el objetivo satisfacer las necesidades del ego, de
la materia. El objetivo es fusionarnos con la energía de la otra persona y
permitirnos el crecimiento de ese vínculo desde el amor y la conciencia. Nos
entregamos en amor, fluimos con el otro, lo cuidamos y respetamos.
Desde ese sentir psíquico logrado podemos llevarlo a la práctica
en un acto sexual tantrico.
¿En qué consiste el
sexo tantrico?
Es como una previa extensa, solo que no busca la penetración
como objetivo final, eso no significa que no suceda, se puede dar como no y
todo es bienvenido.
Te conectas con el otro con miradas, caricias, besos,
abrazos. Sentis la respiración del otro, sus latidos, su calor. Acaricias zonas
erógenas con mucho detenimiento.
Es como jugar como niños de alguna forma, jugar y descubrir
en el otro su placer, tu placer y el placer conjunto.
Todo es muy pausado ya que no hay un objetivo al que
alcanzar, se disfruta de lo que sucede en ese momento, el aquí y ahora
constante. Es un descubrimiento mutuo constante.
Habiendo realizado esta introducción al mundo tantrico, los
invito a que recorran este camino por si mismos, que redescubran su sexualidad,
su aspecto lúdico y amoroso. El tantra es un camino de experiencia mas que de teoría,
experimenten y saquen sus propias conclusiones.
Bienvenidos al Tantra J